jueves, 23 de agosto de 2012

Spigolo sur de Ansabere. La linea perfecta.


El Spigolo Sur de Ansabere es una de las “obligatorias”. Es una de esas vías míticas que desde el primer momento que la ves sabes que no puedes dejar de hacer.
Pero amigo!... viviendo en Badajoz muchas veces es tan (o más) complicado tener la posibilidad de hacer estas vías que la escalada en si misma, así que cuando surge la oportunidad hay que intentar no dejarla escapar.
Y así nos plantamos al pie de esta vía, que recorre un verticalísimo y desplomado espolon de 300 metros, una linea perfecta.

A poco mas de una hora conduciendo desde Jaca se encuentra esta joya.
Llegamos la noche anterior y a las 7 nos pusimos en marcha.

Las agujas siempre visibles durante la aproximación.


Antes de llegar a nuestro objetivo atravesamos zonas de pastoreo, donde además de ovejas nos esperan unos “bonitos mastines” a los que, sino quieres que te coman, hay que intentar no molestar.

El pastor ya lo avisa en el cartel.


Después ya solo toca pensar en escalar.

Nuestra vía recorre el marcado espolón central.


La vía comienza con dos largos fáciles, para enseguida ponerse tiesa.
Los lolos que quieran apurar en libre tendrán que apretar el culo bien, dificultades máximas de 7b/b+ en una escalada muy técnica que nosotros por supuesto no encadenamos (eso sí lo intentamos pero al final perdimos un poco las formas, ¡que se le va a hacer!).

Victor en el V+ del segundo largo.


Despues de esta primera parte llega el apretismo.
Para empezar un diedro de 6c bastante limpio que a mi me parecio muy duro.

Peleandome con el diedro.


A partir de aquí ya empiezas a encontrarte algunas chapas.
Continuamos por un espectacular diedro de 6b (eso dice el croquis, ¡me parto!).

En el paso clave de este largo.


Y ahora llega lo bueno, los dos largos de séptimo grado.
La reseña decía 7a+ y 7b, ¡uff!.
Con más moral que “Marco el día del padre”, comence a escalar en libre, ¿y que pasó?... pues que en la quinta chapa y con un patio de narices que me hacía estar un “pelín” nervioso pense, ¡pero estamos locos, o qué!... y perdí las formas.

Segundos antes de sucumbir al acerismo.

Como ya no había encadene decidimos empalmar este largo con el largo de 7b.
Y como estoy mas tonto que tonto, pues se me ocurrio seguir escalando en libre (o mejor dicho intentarlo) y paso lo que tenía que pasar… un vuelín que ya si que me puso en mi sitio y consiguió que me dejase de tonterías. Vamos que cuando llegue a la reunion me olían las manos a hierro.

¡Qué patio chaval!.

A partir de aquí la cosa suaviza, quedan cuatro largos, 6a+, 6b+, 6c y V+.

En la travesía de 6a+.

Los siguientes largos con una caliza perfecta, son alucinantes.
El primero un placa de 6b+ con bastante aire entre los seguros donde es mejor no caerse. El ambiente esta garantizado

Victor disfrutando de esta caliza increíble.

Y para terminar y algo mejor asegurado, un largazo de 6c con una roca de película.

En la parte final del 6c.

Un último y expuesto largo de V grado nos deja en la cumbre.
¡Objetivo cumplido!.

Si hasta tenemos buena cara.


En resumen, una vía alucinante y súper recomendable en la que conviene ir sobrado de grado (y eso pensando en acerar). ¡Satisfacción garantizada!.

Ah!, y ojo con el descenso!.






3 comentarios:

Anónimo dijo...

Pedazo de hombressssssss, ir pensando en vuestro viaje de semana santa que ya queda menos así no perdéis la forma física. un besazo a los dos y a Tai luego se lo doy en casa jejejejjeje

Anónimo dijo...

Me delato sola jejejejejjeje

Anónimo dijo...

Qué hermosura bicho. Me parto con la narracion.
riri